sábado, 19 de diciembre de 2020

EL VALOR DE LAS CANCIONES EN LA ADQUISICIÓN Y EL DESARROLLO DEL LENGUAJE

 Comenzamos la sesión con la súper bienvenida de Alex y Tania: vacaciones y spa.

Después Marina, comienza a contar diferentes recursos musicales:

- Canticuenticos.

-Canciones cortas.

-Canciones con historias.

- Canciones para trabajar motricidad fina y gruesa.

-Canciones tradicionales.

Seguimos con canciones argentinas: Luis Pescetti y Pin pau.

Escuchamos grupos actuales infantiles con diferentes ritmos y estilos:

-Pascal Comelade,

-Albert Pla.

-Chumi Chuma.

-Yo soy ratón.

-Lali BeGood.

-Uxia Lambona e a Banda Molona.

-Billy Boom Band.

- Veleta Roja.

Recursos relacionados con cuentos y títeres:

- Los titiriteros de Binefar, canciones tradicionales y de autoría propia.

- Joaquín Díaz, cuentos y canciones.

Begoña, nos habla de Tamara Chubarovsky y sus recursos musicales.

Marina continúa con otros recursos para infantil:

- Marta Gómez.

- Magdalena Fleitas.

-Luis Pascetti.

- M Elena Walsh.

-Erikauta.

-Las Magdalenas.

- 150 canciones para trabajar la violencia de género y Rebeca comparte una conferencia de Marina Marroquí, en esta línea.

-Va de cuentos, cuentos y canciones.

Hablamos de recuperar el folklore y Alex comenta la necesidad de utilizar/ recuperar canciones de corro, con libros como los de Ana Pelegrín y Cuentos que caben en un bolsillo.

Hablamos de cuentos cantados como:

-Los cuentos de la colección: De la cuna a la luna de Antonio Rubio.

-Cuentos de Mar Benegas: Le pondremos un bigote, Tras- tras, Cari-caricias...

-Cuentos de Margarita del Mazo: Teresa la princesa , 5 patitos, etc.

Proponemos hacer una recopilación de canciones propias de nuestro folklore (cada una con su historia).

Seguimos con una reflexión en torno a los villancicos, la Navidad y la escuela.

Cierre:

Marina nos lee Mar Benegas Había una pequeña una semilla .

Propuesta de lectura para la siguiente sesión:  Ella pisó la Luna de Belén Gopegui.

Os esperamos en la próxima reunión el 16 de enero con: Patios inclusivos y lecturas diversas.



jueves, 10 de diciembre de 2020

LA ESCUELA COMO ESPACIO DE DESARROLLO PARA EL PENSAMIENTO CRÍTICO Y CIENTÍFICO


   En los últimos meses nos hemos enfrentado a una situación histórica: UNA PANDEMIA MUNDIAL cuyas consecuencias han sido devastadoras, sobre todo para la clase trabajadora y aquellos colectivos más vulnerables.

   En un contexto tan duro a nivel sanitario, social y económico, que ha provocado (y sigue provocando) mucho sufrimiento, no han faltado los bulos o “fake news” y la manipulación mediática, que no han conseguido otra cosa más que aumentar las dudas, el estrés y la ansiedad de las personas.

   Estos bulos se acabarían si hubiese una cultura científica en nuestro país que permitiese desarrollar un pensamiento crítico para poder analizar, comprobar y contrastar las informaciones, evitando su difusión.

   Por otro lado, la falta de conocimiento en torno a los mecanismos necesarios para generar conocimiento científico, ha llevado a no entender las recomendaciones sanitarias, así como las variaciones que sufrían debido a los estudios realizados.

   La incultura científica puede repercutir en la salud de todos, pero son pocas las voces que están exigiendo su presencia en la escuela.

   Si miramos hacia atrás, en el siglo pasado fueron numerosos los intentos y esfuerzos para introducir las ideas filosóficas y científicas de las corrientes más difundidas por Europa en la escuela: así lo reflejaron la Institución Libre de Enseñanza, La Junta de Ampliación de Estudios, los programas de los Grupos Escolares, y maestras y maestros republicanos que dedicaron su tiempo y esfuerzo para construir una escuela científica, artística, crítica y reflexiva.

   Sin embargo, estos esfuerzos fueron silenciándose con el ruido de los fusiles, ocultándose con la luz de las bombas, esclavizándose tras los barrotes y enterrándose en fosos y cunetas.

   Después se hizo el silencio frente a la palabra, el rumor frente a la certeza y así crecieron varias generaciones hasta que la educación volvió a entenderse como motor de cambio.

   Sin embargo, todavía hoy, no hemos conseguido incluir en la escuela una cultura crítica, reflexiva y científica necesaria para salvar vidas, para parar los bulos, para valorar la ciencia y señalar la manipulación.

   Pues como dijo John Dewey en Democracia y Educación. Una Introducción a la Filosofía de la Educación: “Sin la iniciación en el espíritu científico uno no posee las mejores herramientas que la humanidad hasta ahora ha ideado para dirigir efectivamente la reflexión. Sin estas, uno falla en comprender el significado completo del conocimiento.”

Imagen : https://laescueladelarepublica.es/